Rusia, Turquía e Irán seguirán buscando la mejor solución para hacer frente a la situación en Idlib

(SOS).- El embajador ruso ante Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, ha asegurado este miércoles que Turquía, Rusia e Irán seguirán buscando la «mejor solución posible» para hacer frente a la situación en la provincia siria de Idlib.

«Rusia, junto con los demás garantes del proceso de Astaná, se ha esforzado y se seguirá esforzando para que la situación en torno a Idlib se resuelva por medio de las negociaciones y para que la población civil no sufra, algo que ya hemos indicado a todos nuestros socios», ha aseverado Nebenzia en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU.

«Digan lo que digan los demás —sea por envidia o por impotencia— el formato de Astaná es un mecanismo operativo y eficaz», ha subrayado.

Los líderes de Rusia y Turquía, Vladimir Putin y Recep Tayyip Erdogan, respectivamente, acordaron el lunes establecer para el 15 de octubre una zona desmilitarizada en Idlib en la línea de contacto entre los grupos armados y las tropas sirias.

Los ministros de Defensa de ambos países firmaron, por su parte, un memorando sobre la estabilización de la situación en la zona de distensión de Idlib.

Nebenzia ha señalado ante los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que «los elementos clave del memorándum consisten en preservar la zona de distensión y crear una zona desmilitarizada para hacer posible una tregua estable».

«A la vez se confirma como prioridad la lucha contra el terrorismo en Siria en todas sus formas y manifestaciones», ha afirmado el enviado ruso al recordar que «la lucha antiterrorista, consecuente y sin cuartel, es una de las obligaciones clave de todos los países miembros de la ONU», ha dicho el diplomático ruso.

La cumbre de Teherán puede determinar el futuro de la provincia siria de Idlib

(SOS).- La reunión sobre Siria que celebran mañana en Teherán los presidentes de Rusia, Turquía e Irán estará centrada en la inminente operación militar contra la provincia de Idlib, el último gran bastión de los extremistas.

En los últimos días, se han sucedido las declaraciones sobre posibles actuaciones en Idlib, así como los llamamientos a la contención temiendo que una ofensiva del Ejército sirio en esa provincia cause un baño de sangre y una catástrofe humanitaria.

Vladimir Putin, Recep Tayyip Erdogan y Hasan Rohani continuarán en el encuentro de mañana el llamado proceso de paz de Astaná, que ha eclipsado las conversaciones de la ONU para lograr una solución negociada al conflicto sirio y que mañana tendrá un énfasis especial en la suerte de Idlib.

La postura de estos tres países difiere. Rusia e Irán son los principales valedores del Gobierno sirio, mientras que Turquía respalda a diferentes grupos armados.

Erdogan alertó ayer de que un ataque a gran escala puede desencadenar una fuerte oleada de refugiados hacia Turquía, limítrofe con Idlib.

«Ojalá en la cumbre de Teherán tengamos un resultado positivo y consigamos prevenir acciones desproporcionadas contra los habitantes de esa región», subrayó el presidente turco.

Desde el Kremlin, sin embargo, insistieron en que en Idlib se ha formado «un nido terrorista», por lo que «hay que solucionar ese problema».

Rusia asegura que el Ejército sirio se prepara para «arreglar» la situación en el último feudo extremista.

En la misma línea, el ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, dijo que «los terroristas que operan en Idlib deben ser erradicados», aunque matizó que su expulsión se llevará a cabo con «pérdidas humanas mínimas».

Zarif viajó esta semana a Damasco para reunirse con el presidente Bashar al Assad y con su homólogo sirio, Walid al Mualem, en el marco de los contactos que también ha realizado con las autoridades rusas y turcas para abordar los siguientes pasos a dar en Idlib.

Idlib, en el noroeste de Siria y fronteriza con Turquía, es la última provincia que escapa al control del Gobierno sirio y está dominada en gran parte por el Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda.

Desde hace semanas, Damasco envía refuerzos militares a los alrededores de Idlib para liberar la región, al igual que hizo en los últimos meses en otros feudos extremistas, como Guta Oriental, a las afueras de Damasco, o en Deraa, en el sur del país.

Las voces contra la ofensiva no han dejado de escucharse. El presidente estadounidense, Donald Trump, advirtió a Rusia, Irán y Siria de que supondría un «grave error» y acarrearía una «tragedia humanitaria».

Por su parte, el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, pidió a Putin y Erdogan «que hablen y que encuentren una solución» a esta crisis.

«Tratemos de evitar que la última y probablemente mayor batalla de esta guerra en Siria termine en un baño de sangre. Pedimos a todos los países que mantengan una presión moral para evitar una opción militar drástica en Idlib y dar más tiempo a las negociaciones», insistió De Mistura.

En paralelo a la cumbre de Teherán, el Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá también el viernes para analizar la inminente ofensiva y tratar de «evitar» una tragedia.

Erdogan, Putin y Rohani celebrarán una cumbre sobre Siria en Teherán

(SOS).- Los jefes de Estado de Turquía, Rusia e Irán celebrarán el próximo 7 de septiembre una cumbre en Teherán para analizar la situación de la guerra en Siria, según anunció hoy la Presidencia de Turquía.

Recep Tayyip Erdogan, por Turquía, se reunirá con sus homólogos de Irán, Hasan Rohani, y Rusia, Vladimir Putin, para continuar con el llamado proceso de Astaná, en el que los tres países están implicados para lograr una solución negociada al conflicto en el país árabe.

El presidente turco propuso el pasado julio que esos tres países, además de Alemania y Francia, celebraran el 7 de septiembre una cumbre en Estambul.

La Presidencia de Turquía no ha dado detalles sobre ese cambio de planes y solo ha confirmado la cumbre tripartita en Teherán.

Uno de los asuntos que se tratarán en la capital iraní es la anunciada ofensiva del Gobierno sirio, apoyado por Rusia, contra la provincia de Idlib, uno de los últimos baluartes de los extremistas.

Moscú y Teherán respaldan a las autoridades de Damasco, mientras que Ankara apoya a diferentes grupos armados.

Los ministros de Exteriores ruso y turco se han reunido en dos ocasiones este mes para tratar la situación en Idlib, la última el pasado viernes.

Aunque Turquía reconoce que hay que acabar con los grupos «radicales», también ha advertido de que es imprescindible diferenciar entre la población civil y los combatientes para evitar una «catástrofe humanitaria».

Rusia, por su parte, reivindica el derecho del Ejército sirio a acabar con los «terroristas», en alusión al Frente al Nusra, entre otras bandas armadas.

Egipto se compromete a trabajar para lograr una solución política a la guerra en Siria

(SOS).- El presidente de Egipto, Abdelfatah al Sisi, prometió hoy que su país continuará sus esfuerzos para detener el deterioro de la situación en Siria, durante una reunión con el enviado especial de la ONU para el país árabe, Staffan de Mistura.

En el encuentro, Al Sisi destacó la importancia de la solidaridad de la comunidad internacional para trabajar en aras de «una solución integral y duradera a la crisis siria», según un comunicado de la presidencia.

Asimismo, el mandatario subrayó el apoyo de Egipto a los esfuerzos de la ONU.

Según la misma fuente, De Mistura resaltó la importancia del papel de Egipto en Oriente Medio y señaló que aspira a coordinarse más con las autoridades de El Cairo en el próximo periodo, «especialmente porque puede jugar un papel principal para llegar a una solución a la crisis en Siria».

El mediador de la ONU se reunió ayer con el titular egipcio de Exteriores, Sameh Shukri, a su llegada a El Cairo, después de haber visitado Irán, uno de los principales valedores del Gobierno sirio.

El portavoz de Exteriores, Ahmed Abu Zeid, detalló en una nota que la visita de De Mistura se produce en el marco de «el interés de la ONU para intercambiar opiniones e intensificar la coordinación con Egipto sobre la forma de lograr una solución política a la crisis siria y acabar con el retroceso actual».

Al comienzo de la reunión, el diplomático ítalo-sueco informó a Shukri de los últimos acontecimientos políticos, de seguridad y humanitarios en el país árabe, y dio su evaluación a los esfuerzos realizados a nivel internacional y regional para impulsar el proceso político, según el texto de la Cancillería egipcia.

Por su parte, el ministro recalcó la continuación de los esfuerzos de Egipto para «establecer una solución política a la crisis siria de una manera que preserve la entidad y la unidad del Estado sirio y su integridad territorial».

En Teherán, De Mistura trató con la autoridades iraníes la situación en Siria y propuestas para formar el comité constitucional para hallar una solución a la guerra.

El mediador de la ONU abordó con el principal negociador iraní para los asuntos de Siria, Hosein Yaberi Ansari, iniciativas y medidas ejecutivas específicas para comenzar a trabajar en el citado comité.

Ansari dijo tras la reunión, celebrada el domingo, que discutieron sobre la nueva ronda de consultas que se celebrará en Ginebra entre el 18 y 19 de junio.

A esa ronda acudirán, además de De Mistura, altos funcionarios de los tres países garantes del proceso de Astaná: Rusia, Irán y Turquía.

El diplomático ítalo-sueco insistió en la necesidad de continuar las consultas entre esos tres países, el Gobierno y los grupos armados y la ONU para formar y activar el comité constitucional.

Otro tema tratado en la reunión de Teherán fueron los esfuerzos para llevar a cabo un intercambio de presos entre las partes en conflicto.

La ONU sigue trabajando en la formación del comité constitucional sirio, pactado a finales de enero en la localidad rusa de Sochi.

La Unión Europea y la ONU insisten en la necesidad de reforzar la vía política en Siria

(SOS).- En la conferencia de donantes que se celebra en Bruselas, la alta representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Federica Mogherini, pidió hoy a Rusia e Irán «presionar a Damasco» para que acepte sentarse en la mesa de negociación bajo el auspicio de la ONU con el objetivo de lograr una solución política en Siria.

La UE espera con este encuentro insistir en que «la única paz sostenible para Siria estará vinculada a un proceso político bajo los auspicios de la ONU», subrayó Mogherini, quien lamentó «la escalada de las actividades militares».

«Eso es exactamente lo contrario de lo que estamos comprometidos a hacer», dijo, y pidió a los garantes de los Acuerdos de Astaná —Rusia, Turquía e Irán— que «ejerzan presión para unas negociaciones significativas».

Por su parte, el representante permanente de Rusia ante la Unión Europea, Vladimir Chizhov, aseguró estar «perplejo» por la ausencia de representantes del Gobierno de Damasco en la segunda conferencia de apoyo al futuro de Siria y su región organizada por los Veintiocho y Naciones Unidas en Bruselas.

«Debería decir que estoy perplejo por el formato del encuentro de hoy, que no incluye a representantes oficiales del Gobierno sirio. Parece extraño, por decir lo menos, que los distinguidos delegados estén planeando ayudar a Siria en una situación donde los contactos oficiales con el Ejecutivo legítimo del país han sido tabú durante muchos años para los políticos europeos», aseveró el embajador.

El diplomático realizó estas declaraciones en su intervención durante la nueva edición de la conferencia de donantes, después de que en 2017 no asistieran autoridades rusas a la cita.

Chizhov también instó a establecer una cooperación «cercana» entre los «potenciales donantes» y las autoridades sirias, para mejorar la situación humanitaria en el país árabe.

Ayer, el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, reconoció que «la situación en Idlib nos preocupa mucho desde el punto de vista humanitario». «Es un nuevo y gran reto», añadió.

«Hemos visto en los últimos días y semanas que las conquistas militares, las conquistas territoriales y la escalada militar no aportan solución política, sino todo lo contrario», apuntó De Mistura en una rueda de prensa conjunta con la jefa de la diplomacia europea.

En su intervención ante los medios, el diplomático italo-sueco afirmó que es necesario «rebajar el grado de la retórica en torno a Siria», para poder retomar el diálogo y buscar una solución política.

La conferencia de donantes tiene como objetivo superar los 5.630 millones de euros comprometidos el pasado año para asistir a los ciudadanos sirios y las comunidades de acogida de refugiados.

En el segundo día de la cita internacional en Bruselas con representantes de más de 80 países, grupos de ayuda y organismos de Naciones Unidas, el jefe de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), Mark Lowcock, agradeció a la UE, Alemania y Reino Unido sus «promesas excepcionalmente grandes».

Las ayudas logradas están no obstante por debajo de las necesidades. La ONU ya adelantó que podrían registrarse recortes en algunos programas. «Estamos desesperadamente faltos de recursos», lamentó Lowcock el martes. La OCHA logró recaudar solo la mitad de los fondos que necesitaba en 2017, precisó.

(Fuente: Agencias)

Rusia acusa a Estados Unidos de violar el derecho internacional en Siria

(SOS).- El ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov, acusó hoy a Estados Unidos de obstaculizar una solución pacífica del conflicto sirio mediante «la violación de todas las normas del derecho internacional».

«(Estados Unidos) mediante la violación de todas las normas del derecho internacional, viola gravemente la resolución del Consejo de Seguridad», sostuvo Lavrov durante una reunión en Astaná con sus homólogos de Irán y Turquía, Mohamad Yavad Zarif y Mevlut Cavusoglu, respectivamente.

«Obviamente, se inclinan por la partición de Siria para reemplazar al régimen y crear pequeños principados controlados por actores externos de este importante país de Oriente Medio», añadió el ministro ruso.

Aun así, Lavrov aseguró que el proceso de Astaná continuará su trabajo «del lado correcto del derecho internacional» y pidió a la coalición internacional liderada por Estados Unidos que «no proteja a los extremistas como ocurre actualmente en Guta Oriental».

Estas palabras han contradicho la resolución tomada ayer por la Eurocámara en la que se pidió al Gobierno sirio, y a Rusia e Irán, que lo respaldan, poner fin a los enfrentamientos en la zona de Guta Oriental.

«Es evidente que algunos colegas occidentales intentan preservar el potencial de combate de los terroristas. El constante bombardeo de Damasco y el bloqueo de los convoyes con ayuda humanitaria provocan descabelladas acusaciones a las autoridades sirias y rusas. A pesar de toda la exageración planteada en torno a la situación en Guta Oriental, seguimos trabajando para ayudar a las autoridades sirias», dijo el jefe de la diplomacia rusa.

Por su parte, el ministro kazajo de Exteriores, Kairat Abdrakhmamov, instó a Washington y Moscú a sostener un «diálogo constructivo» sobre la paz en Siria.

«La estrecha cooperación de las dos fuerzas satisfará los intereses de todos los países», dijo Abdrakhmamov.

Los ministros de Exteriores de los tres países garantes del alto de fuego en Siria adoptaron una declaración conjunta tras su reunión de hoy para «continuar ayudando a los sirios en la restauración de la unidad del país y la búsqueda de una solución política», según Lavrov.

También acordaron celebrar una nueva ronda del Proceso de Astaná sobre la paz en Siria a mediados de mayo.

La octava y última ronda de negociaciones de Astaná sobre la paz en Siria, que contó con la participación de representantes de las autoridades sirias y de los grupos rebeldes, tuvo lugar el 21 y 22 de diciembre.

Esa ronda concluyó con la convocatoria de un congreso de diálogo nacional sirio, que se celebró a finales de enero en la ciudad rusa de Sochi y en el cual se acordó crear una comisión constitucional bajo los auspicios de la ONU.

(Fuente: Agencias)

Erdogan acusa a EEUU de estar en Siria para dañar los intereses de Turquía, Irán y Rusia

(SOS).- El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, acusó hoy a Estados Unidos de estar en Siria para dañar los intereses de Turquía, Irán y «quizá Rusia», y volvió a criticar a Washington por su apoyo a milicias kurdosirias que el Gobierno de Ankara considera terroristas.

«¿Por qué Estados Unidos continúa enviando armas al norte de Siria después de expulsar al Estado Islámico? ¿Por qué seguís allí? ¿Por qué aún llegan armas? Hacéis cálculos contra Turquía, Irán o quizá Rusia», sostuvo el presidente turco en un encuentro de su partido en Ankara.

Rusia, Turquía e Irán son garantes del alto el fuego decretado en Siria hace casi un año y patrocinan el llamado proceso de Astaná, pese a que Moscú y Teherán respaldan el Gobierno sirio, mientras Turquía colabora con las milicias rebeldes alzadas en armas contra las autoridades de Damasco.

Erdogan volvió a demandar que las Unidades de Protección del Pueblo (YPG) se retiren de la región de Manbech y volvió a criticar que Estados Unidos siga enviando armas a esa guerrilla cuando da por hecha la derrota del Estado Islámico.

También criticó que Estados Unidos no haya cumplido la supuesta promesa que hizo al Gobierno de Ankara de forzar la retirada de las YPG de ese territorio, donde además Washington tiene a militares desplegados.

«Ellos (Estados Unidos) nos dijeron que saldrían de Manbech, ¿por qué seguís allí ahora», declaró.

Las YPG han sido el principal aliado de Estados Unidos en la lucha contra los yihadistas en Siria, pero las autoridades de Ankara las definen como terroristas por sus estrechos vínculos con el Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda de Turquía.

El Gobierno turco temía que las YPG se hicieran también con el control del territorio entre Manbech y Afrin, una distancia de apenas 80 kilómetros, para establecer una franja bajo dominio kurdo a lo largo de toda la frontera norte de Siria con Turquía.

Turquía lanzó el pasado 20 de enero la operación Rama de olivo contra las YPG en el enclave sirio de Afrin, una zona aislada del resto del territorio dominado por esas milicias kurdas y donde Estados Unidos no tiene presencia militar.

El Ejército turco afirma que ha «neutralizado» (abatido, herido o capturado) a 970 milicianos de las YPG desde el inicio de la ofensiva.

A su vez, al menos 18 soldados turcos han muerto en la operación en Afrin.

Las relaciones entre Estados Unidos y Turquía, socios militares en la OTAN, se han deteriorado en los últimos 18 meses por diferencias en Siria y por la negativa de Washington a extraditar a un clérigo islamista, Fethullah Gülen, al que el Gobierno de Ankara acusa de organizar el golpe de Estado de 2016.

Estados Unidos alega que la decisión dependen de la Justicia y que las autoridades de Ankara no han entregado pruebas de peso sobre la implicación de Gülen en la asonada.

(Fuente: Agencias)